
Una de las razones por las que la gente abandona el gimnasio o los
entrenamientos es la falta de compañeros de entrenamiento. Hacer un grupo de entrenamiento es un gran acierto, sobre todo ahora en verano que las tardes son más largas y donde podemos disponer de más tiempo libre.
Con un grupo de entrenamiento ya no hay excusas
para no salir a entrenar. Cuando uno va al gimnasio o a entrenar solo,
si algún día nos entra la pereza lo más seguro que es no vayamos. Si
contamos con más gente y tenemos nuestros horarios o días establecidos
para salir a correr, con la bici, gimnasio, etc, seguro que no fallamos.
La socialización cuando hacemos deporte es uno de
los puntos fuertes para engancharnos. Se deja de lado el factor esfuerzo
y se potencia la motivación hacia la práctica deportiva, con lo que a
corto y largo plazo hay más posibilidades de éxito, sea cual sea nuestro
objetivo: perder peso, preparar una carrera, ganar masa muscular…
La otra gran ventaja del entrenamiento personal en grupo es que nos permite interactuar
con nuestros compañeros de entrenamiento. Las sesiones de entrenamiento
personal en grupo consiguen así un componente de diversión y de
socialización que un entrenamiento de una sola persona no posee.
Por supuesto, los objetivos de todas las personas del grupo deben de
ser similares, y es trabajo del entrenador adaptar ls distintos
ejercicios y movimientos a los fines que se quieren conseguir. Esto
exige, por parte del profesional del fitness, una gran versatilidad e imaginación.
El uso de implementos como los fitball, glidings, balones medicinales, bandas elásticas o TRX
juegan un papel crucial a la hora de mantener la motivación de los
asistentes a la sesión. Además, la inclusión de distintos ejercicios
pertenecientes a diferentes disciplinas,Pilates ejercicios de caracter ludico, por
ejemplo, hace de cada sesión una experiencia nueva.
¿Haz realizado algún entrenamiento personal en grupo? ¿A quién invitarías para compartir una sesión?
Consultas e informes: vzpersonaltrainner@gmail.com